Ante los hechos que están aconteciendo en nuestra sanidad pública, el deterioro constante, las listas de espera permanentes, cuesta mucho trabajo entender que ¿nadie sabe solventarlas?, ¿no hay ni un solo mandatario que sepa lo que hay que hacer?
En el mismo sentido, los continuos colapsos en los servicios de urgencias, el mal trato a los pacientes, la falta de interés profesional de los trabajadores, entre otras razones la poca motivación, los escándalos permanentes que rodean la sanidad, el más reciente fallecimiento de la niña canaria, etc
Desde luego, conociendo a la consejera de sanidad, no esperábamos una respuesta clara y contundente por parte de ella ni de las autoridades sanitarias, lamentando lo sucedido y pidiendo disculpas a la familia, pero lo más escandaloso es que no ha habido ¡manifestaciones de ninguna autoridad! Ministra, Presidente del Gobierno, etc. etc. etc. ni un “vamos a investigar” poniendo los medios para aclarar algo que no debió suceder ¡nunca!
La falta de respuesta de los mandatarios en el ámbito sanitario hace recapacitar ¿son todos tan malos y torpes al gestionar?
¿No tienen interés para que la sanidad sea de calidad?
Es realmente llamativo que, a través del Defensor del Paciente y de la Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública, sean continuas las llamadas de atención, las denuncias por negligencias, las peticiones a las distintas fiscalías y ¡nadie! de los mandatarios se asombra ¿Por qué?, seguramente al parecer esto es lo que interesa cuanto más deterioro más ahínco en privatizar.
Por tanto, seguirán empeorando las condiciones de trabajo de los profesionales y la calidad de la atención que tendrán los pacientes y sus familias, en definitiva entre todos la matan y ella sola se muere, pero la ciudadanía no lo permitiremos: la sanidad pública es un logro que ¡nadie! debe arrebatarnos.