Cada vez más personas optan por someterse a cirugía estética para mejorar aspectos específicos de su apariencia física, pero la negligencia médica puede tener consecuencias fatales para quienes, antes de la intervención, estaban en buen estado de salud. Carmen Flores, presidenta de 'El Defensor del Paciente', informó que en 2022 recibieron 282 denuncias relacionadas con esta problemática.
Un caso destacado es el de Sara Gómez, una mujer de 39 años que falleció debido a complicaciones durante una intervención estética para transferir grasa abdominal a los glúteos. La operación fue realizada por un cirujano cardiovascular sin especialidad en Cirugía Plástica, Reparadora y Estética. Flores resalta los vacíos legales en la cirugía estética, como la posibilidad de que médicos de cualquier especialidad realicen cursos de cirugía estética y practiquen, lo cual considera peligroso.
La presidenta también señala riesgos en la publicidad televisiva y mediática que incentiva a personas jóvenes y saludables a someterse a operaciones innecesarias. Advierte sobre clínicas que ofrecen operaciones a precios bajos, subrayando que en asuntos de este tipo no se debe escatimar en gastos.
Otro problema es el alquiler de quirófanos, donde clínicas privadas no cuentan con suficientes recursos para atender complicaciones, debiendo trasladar a los pacientes a hospitales públicos. En el caso de Sara Gómez, el quirófano alquilado no estaba adecuado para tales intervenciones, lo que pone en peligro a las personas.
Flores también destaca la importancia del consentimiento informado y propone que este sea grabado verbalmente, para que los pacientes comprendan realmente los riesgos y beneficios de la cirugía.
En cuanto a las indemnizaciones, Flores critica las cantidades consideradas "ridículas e insultantes" y aboga por una revisión más seria de estos casos. Hace hincapié en que la ley debe impedir que cirujanos inhabilitados en el ámbito público continúen ejerciendo en el privado. Concluye afirmando que es necesario que la ley aborde estas cuestiones para proteger a quienes se someten a intervenciones quirúrgicas.